“Tocar junto a Barón Rojo y Celtas Cortos fue un antes y un después”

Entrevista con José Miguel Medrano, director de la Banda de Música de Santurtzi

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José Miguel Medrano, durante una actuación con la Banda

La agrupación ha cumplido 75 años, una efeméride que ha sido posible “gracias al tesón y la dedicación” de sus componentes

Entrevista con José Miguel Medrano, director de la Banda de Música de Santurtzi

Este 2024 se cumplen 75 años de la Banda de Música de Santurtzi, ¿qué supone alcanzar esta cifra?
Supone que ha merecido la pena el esfuerzo que hemos hecho todas las personas que han formado y que formamos parte de la Banda de Música porque, además, hemos visto reconocido el trabajo en el pueblo. Hay que mencionar que hacemos 75 años como Agrupación Musical Banda de Música de Santurtzi ‘Unión Musical Vizcaína’, que se constituyó en 1949 tras la desaparición en 1936 de lo que fue la Banda de Música Municipal de Santurtzi.
 

¿Cuáles han sido las actuaciones más importantes a lo largo de esta trayectoria?
Las más relevantes han sido los conciertos en Fiestas del Carmen que, año tras año, hacemos en el escenario central. Comenzamos con Oskorri y Barón Rojo en los años 2008 y 2009 y, a partir de ahí, hemos compartido escenario con artistas como Celtas Cortos, Los Secretos, Coti, Mocedades, Sorotan Bele, Eñaut Elorrieta, Korrontzi, Serafín Zubiri, o Sociedad Coral de Bilbao.
 

¿Ha pasado la Banda por momentos de dificultad?
Sin duda. Podemos decir que la Banda de Música de Santurtzi continúa activa por el tesón, dedicación y ganas de los componentes de la agrupación, porque a pesar de los intentos institucionales para que en su momento desapareciera, nos propusimos que íbamos a seguir adelante. Nos quisieron ahogar económicamente, nos empeñamos en poner todo de nuestra parte para que no desapareciera, conseguimos un hilo de aire y logramos mantenernos vivos. Resistimos y, de momento, aquí continuamos, pero no sin dificultades aún. Mantener una agrupación musical de estas características requiere un esfuerzo y tendremos que analizar la situación entre todas las partes.
 

Y el momento de mayor apogeo, ¿cuándo fue?
Indudablemente desde que formamos parte del cartel de los conciertos de fiestas. Cuando se acercan las fechas, la pregunta que nos hace todo el mundo es inevitable: ‘¿con quién tocáis este año?’. El inicio con Barón Rojo o Celtas Cortos marcó un antes y un después en la presencia y el reconocimiento de la Banda en el pueblo. Comenzamos a romper estereotipos de que una Banda de Música sólo tocaba un determinado tipo de música y ya se han dado cuenta de que no es así. Otro ejemplo clarificador de ello es el concierto del pasado mes de abril cuando interpretamos junto a la Coral Lagun Zaharrak dos temas de Eskorbuto. “Estáis rompiendo moldes”, nos decían. Otros momentos importantes son los conciertos de Navidad que hacemos junto a Lagun Zaharrak. Significativo es que el aforo se completa tres horas después de poner las entradas a la venta. Intentamos hacer programas amenos, atractivos con temas conocidos y la gente lo agradece. El éxito está asegurado.
 

¿Cuáles dirías que son las señas de identidad de la Banda de Música de Santurtzi?
Intentamos estar presentes en los actos más relevantes que se celebren en el pueblo, en todos los barrios, pero a veces no es posible por cuestiones presupuestarias. Nos gusta ser cercanos a las y los ciudadanos de Santurtzi. Muchos de los y las componentes somos del pueblo y por ello quizás nos impliquemos más en el trabajo de la asociación.
 

¿Goza de buena salud la Banda en la actualidad? ¿Hay relevo generacional?
Estamos vivos y respiramos, que no es poco, pero necesitamos una mayor implicación institucional. Si queremos que el valor cultural que tenemos en estos momentos se mantenga y en la medida de lo posible se refuerce, el apoyo del Ayuntamiento es imprescindible. Tenemos que llegar a consensuar las necesidades que la Banda necesita, un programa anual de actuaciones, unas actividades que se consideren importantes y con relevancia en el municipio y un presupuesto para todo ello. Si no se apuesta por impulsar, apoyar, invertir culturalmente en una agrupación de estas características, es muy complicado que se mantenga viva. Las y los músicos tienen que sentir el respaldo institucional, si no lo que se consigue es que se desmotiven y se vayan. Hay relevo pero hay que cuidarlo.
 

¿Sentís que sois parte importante en el municipio?
Sin duda. Nos sentimos queridos y reconocidos. La gente se nos acerca cada vez más y nos felicita por las actuaciones. Creo que hemos conseguido, dentro de nuestras limitaciones, ser parte activa de la cultura del pueblo.
 

En tu caso son 40 años en la Banda, más de 30 como director, ¿qué significa en tu vida?
Pues ha sido todo o casi todo en mi vida. Aunque no de manera profesional, ocupa un espacio muy amplio. El compromiso desde un inicio con la agrupación musical, con la cultura y con el pueblo en este sentido me lleva a dedicarle mucho tiempo y esfuerzo. Siempre he estado muy motivado para intentar hacer cosas nuevas y que la Banda fuese reconocida y apreciada en el pueblo. Pero como todo, siempre hay un inicio y un final. El concierto de Navidad de este año será el último que dirija. Hay que dejar paso a otra gente, con nuevas ideas, nuevos proyectos y nuevas ilusiones.
 

¿Qué actos se están realizando y se van a llevar a cabo con motivo de esta efeméride?
Hicimos una kalejira con antiguos componentes de la banda que pudieron estar con nosotros ese día, y una comida para recordar y compartir experiencias con aquellas personas que ya no forman parte de la Banda. Además, vamos a hacer una exposición de fotos en la Casa Torre este mes, desde los inicios de la Agrupación como Unión Musical Vizcaína. Además, hemos diseñado un logotipo que va a estar presente en cada actuación durante este año.