Santurtziko Genealogia Zaleak reapsa su labor y su trayectoria
¿Cuál es la trayectoria de Santurtziko Genealogia Zaleak?
Cada uno de nosotros teníamos una trayectoria individual en este campo desde hace muchos años. En una ocasión coincidimos Jon Koldo Fernández García de Iturrospe, Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales, Itziar Murua Díaz y María Jesús Martínez Nieto en unas jornadas genealógicas; empezamos a interactuar sin una intención concreta pero, eso mismo, nos llevó a formar este grupo que salió más a la palestra tras ‘irse’ Jon tan prematuramente. A raíz de ese hecho, con el apoyo de su familia, empezamos a gestionar el material que él había producido con tanto acierto a través de la web de Santurtzi Historian Zehar. Actualmente, el día 29 de cada mes (coincidiendo con el día del mes en que él se fue) preparamos una entrada que sigue alimentando la web y vamos añadiendo datos a lo que él nos dejó. Por otra parte, creamos la página de Facebook ‘Santurtziko Genealogia Zaleak’ con la intención de dar a conocer el fruto del trabajo que teníamos y que, a partir de mayo de 2020, ya no iba a ver la luz a través de Jon.
Tenéis ya nada menos que 80.000 datos registrados en vuestra base, ¿esperabais llegar a una cifra así?
La verdad es que no. Ha sido un tiempo récord en el que hemos duplicado con creces lo que teníamos hace año y medio. Y sigue creciendo por momentos, jajaja.
¿Cómo es el trabajo que desarrolláis a la hora de buscar el pasado genealógico de una persona?
Hacemos trabajo de consulta en los diferentes archivos diocesanos, históricos y genealógicos. Desde ahí, con lo que encontramos, cotejamos las diferentes fuentes, que a veces no coinciden, y hasta que no desentrañamos el dato, no lo damos por bueno. Las mayores dificultades suelen ser con la forma de registrar los nombres y apellidos; depende de quién escribía o transmitía el dato y de la propia conservación de los libros.
¿Hay alguna anécdota curiosa que os haya llamado la atención en vuestras investigaciones?
Muchas. Por ejemplo, el caso de una persona que falleció en Santurtzi en 1915. Los datos de los familiares no encajaban y terminamos encontrando que fue un indiano de Asturias que, junto a su hermano, crearon escuelas en su pueblo natal. Pasó por Gipuzkoa, se casó con una viuda con hijo (éste resultó ser diputado de Gipuzkoa por San Sebastián). No tuvieron hijos comunes, recalaron en Santurtzi como ‘propietarios’, viviendo más de 20 años en nuestro pueblo hasta sus respectivos fallecimientos, estando residiendo en Avenida Murrieta 20 donde pagaban una renta de más de 300 pesetas de las de entonces.
¿Notáis interés de los vecinos de Santurtzi por vuestro trabajo?
Ciertamente sí. A veces les aportamos datos que desconocían y nos lo agradecen. En general, hay muy buena acogida tanto por los detalles genealógicos como por la historia que rodea a los vecinos de cada época.
¿En qué os basáis para buscar a cada persona?
En los inicios, nos movía, lógicamente, nuestra relación personal y, al avanzar en los temas que surgían, todo era digno de interés. Hoy en día, ya vamos teniendo peticiones por parte de nuestros seguidores, aunque seguimos y no dejamos de lado a nadie que haya tenido relación con Santurtzi por la causa que fuere.
Entiendo que la mayoría de investigaciones son satisfactorias, pero otras veces llegaréis a puntos de bloqueo en los que no es posible seguir avanzando.
La satisfacción nos acompaña en cada dato que encontramos, pero nos da mucha pena cuando faltan datos y no existen fuentes a las que poder acudir. De todas formas, incluso cuando algo queda bloqueado, no lo echamos al olvido porque a veces ‘salta la liebre’ cuando menos lo esperamos.
Además del pasado genealógico de las personas, ¿qué otras investigaciones históricas realizáis?
De todo tipo: sanitaria, cultural, político-social, marítima, oficios, barrios, costumbres, etc.
¿Qué importancia creéis que tiene que se conozcan y divulguen estos datos?
Consideramos que conocer nuestra historia nos hace más humanos y más libres. Es bueno el referente de nuestro pasado para emular y cultivar lo positivo, así como para aprender de los errores vividos. Santurtzi tiene una historia muy rica y, a nivel humano, una gran riqueza de todos los que nos precedieron con diversidad inmensa de orígenes, pero trabajando codo con codo para llegar a nuestros días con el orgullo que nos acompaña. Esto nos anima a seguir con esta tarea tan bonita.